Diario de viaje: Beku Viva en Mallorca

Mallorca es la isla más grande de todo el archipiélago balear, le siguen: Menorca, Ibiza y Formentera. Su relieve está formado por la Sierra de la Tramontana (en catalán Serra de la Tramuntana), haciéndola un sitio bellísimo y cargado de naturaleza, rodeada por el Mar Mediterráneo.

Para mí es un sitio muy especial porque mi abuelo paterno nació allí, precisamente en el pueblo de Santanyi, en el que tuve la suerte de vivir junto a mi familia durante dos años.

Mi hermano Sebastián, que se ha graduado en Historia del Arte (compartimos los gustos por el arte) tiene el honor de trabajar en el archivo de investigación que está justito al lado de la Catedral de Palma. Asi que junto a él hemos hecho todo el recorrido historico-artístico de la ciudad. Nos ha contado que para muchos artistas y pintores la isla ha sido fuente de inspiración…y no es para menos. De hecho, uno de los artistas que vivió en la isla y se dejó influenciar e inspirar por toda su belleza fue Joan Miró.

Lo que amo de la isla es el paisaje rústico característico y colorido sobre todo en época de primavera, debido al florecimeinto de almendros, amapolas rojas y margaritas en el campo junto con la bella luz del sol reflejada en el azulado y transparente Mar Mediterráneo. Ni hablar de los detalles, los aromas, su gente, su gastronomía, sus carreteras y cada pueblecito. Me he vuelto literalmente loca sacando fotos, todo era encantador, digno de ser fotografiado y compartido con ustedes.

Al Sur: Mercadillo de Santanyi

He vuelto de Mallorca 100% inspirada, realmente éste tipo de mercados son ideales para buscar las mejores opciones de frutas y verdura de la zona, además de degustar 5 tipos de aceitunas en conserva, oler hierbas aromáticas y disfrutar de éste maravilloso espacio disfrutando de algún zumo natural o un café en algún bar de la plaza mayor del pueblo.

Una de los eventos más espectaculares de Santanyi en primavera, son los mercadillos de miércoles y sábados donde productores y emprendedores de frutas, verduras, conservas, quesos, artesanías se juntan para ofrecer un espectáculos de sabores, colores y aromas. Ideal para ir con la cesta mallorquina de mimbre (típica) completamente vacía para luego cargarla de alimentos  sabrosos y únicos para inspirarse en crear platos.

En la feria había un grupo de chicos ofreciendo degustación de zumos naturales hechos en el momento, así que he probado uno de mango y pìña con notas de jengibre que se los súper recomiendo para que lo hagan en casa.

Otras propuestas presentes eran los emprendedores que ofrecian mezclas de sal marina con hierbas, flores y especias como cúrcuma y otras con lavanda, hibiscus y apio, que dicho sea de paso me tente y compré mezcla de sal marina y apio, ideal para probar en ensaladas. ¿Y mis amigas las bayas?, pues decirte que no se quedan afuera de ésta historia… había: fresas, moras, arándanos y frambuesas.

Lo mejor de éstos sitios es que predomina la energía positiva, el contacto con el otro y la acción de los 5 sentidos. Considero que visitar éstos mercados son una manera saludable de organizar actividades para el fin de semana, el hecho de que se organicen en la plaza mayor es una forma de compartir y disfrutar con otros, de generar en nuestras vidas un momento, un instante, una mañana de felicidad ¿no  les parece?, a mí me genero mucha alegría poder pasar la mañana del sábado allí, me lleno de energía e inspiración.

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 Valldemossa: calles estrechas y cocas de patata

Valldemossa es un bellísimo y occidental pueblo de la isla rodeado por la Serra de la Tramontana (recomiendo que lo visites si algún día viajas por allí), con calles estrechas llenas de encanto y naturaleza en el que han vivido Chopin, Ruben Darío y Jorge Luis Borges.

Algo que la caracteriza a nivel gastronómico son las famosas «coca de patatas» (foto de la derecha, abajo) que puedes conseguir en cualquier horno (panadería) pero tener en cuenta que están elaboradas con manteca de cerdo y huevos, ya probaré de hacer una versión vegana…solo dejarme experimentarlo poco a poco. Son una especie de bollo esponjoso y ligero que suele acompañarse con chocolate caliente en invierno, té o café según el gusto de cada uno.

Algo que también hay en Valldemossa pero que está por toda la isla son las ENSAIMADAS, producto típico y tradicional de la Isla que también está elaborado con manteca de cerdo peeeero ¡tengo una buena noticia: EXISTE LA VERSIÓN VEGANA, así que vayan preparando los delantales!.

El azúl profundo del Mar Mediterráneo

Cuando vivía en Mallorca hace algunos años, solía salir del trabajo e irme a comer a la playa hasta esperar volver entrar a trabajar, cuando terminaba de comer me relajaba y respiraba el aire fresco, me debaja invadir por el sol y el arena tibia. También recuerdo perderme mirando el mar , pedirle deseos o contarle en voz baja mis sentires.

¿Les paso alguna vez ésto?, pues a mí éstas aguas me dejan en un estado meditativo y renovador de energía. El mar es una fuente potencial de vida, guarda en cada particula la historia de la creación, hay mucha información en el agua y por éste mar han pasado y sucedido miles de cosas, navegantes, piratas, nadadores, turistas y mi hermano que le encanta bucear y mirar el mundo que está por debajo.

Con mi esposo felizmente nos quedamos en la costa, tomando sol, chapoteando en la orilla y tomando mate (una bebida muy tradicional de mi hermosa Argentina). Realmente ha sido un viaje muy reparador, después de todos éstos meses de mudanza, debo confesarles que éste viaje me ayudo a relajarme de verdad, necesitaba el contacto con la naturaleza lejos de las obligaciones, los trámites y estar en contacto con mi familia también ha sido un regalazo del universo.

LAS RECETAS DEL VIAJE

Y ahora viene la mejor parte, las recetas del viaje que puedes visitar aquí: 3 recetas veganas para organizar un día saludable.